jueves, 21 de agosto de 2008

De la tristeza a la fiesta interminable hubo sólo 12 pasos de diferencia


Estudiantes mostró una mejoría, esa que tanto se necesitaba para salir de la mala racha. Igualmente, el triunfo por penales ante Independiente dejó en claro que la mejoría no es total. El Pincha jugó dos tiempos muy distintos. El primero, arrasando a Independiente en todos los sectores del campo de juego y en muchos momentos jugando con inteligencia. La Gata Fernández abrió el camino y Estudiantes siguió atacando pero no pudo estirar la ventaja. Ahí todo era sorpresa, ya que el equipo de Sensini revertía totalmente la imagen dejada en los partidos anteriores y transmitía seguridad a la gente. Independiente no veía la pelota.

La sorpresa fue el segundo tiempo, donde Borghi metió mano en Independiente y Estudiantes cambió su actitud. Como si se hubieran cambiado las camisetas, en la etapa final era Independiante quien asedió a Estudiantes y era el Pincha el que no le encontraba la vuelta al partido. Núñez empató para los de Avellaneda en el arranque y la reacción de Estudiantes jamás apareció. Independiente manejaba la pelota y los tiempos del partidos y el Pincha no tenía ideas para ponerse en ventaja sí o sí para continuar con vida en la copa. Así como en los primeros 45 minutos Estudiantes le perdónó la vida al Rojo, en el segundo fueron los de Avellaneda quienes no liquidaron el partido. En esta segunda parte se vieron los errores defensivos, que aún se mantienen en la última línea albirroja. Independiente no lo liquidó y a Estudiantes le quedó una pelota parada que la jugó a matar o morir. Fue Salgueiro el que entró solo ante la mirada de los defensores del Rojo para poner el 2-1 y el estallido a falta de tres minutos para el final. Era la gloria, porque el equipo de Sensini que lo pudo rematar en el primer tiempo y estaba sin reacción en toda la segunda parte llegaba a los penales, que hasta ese momento parecían lejanos.

Fue desde los doce pasos desde donde se concretó el pasaje a octavos, ya que Verón, Caldera, Moreno, Salgueiro y Boselli vencieron a Assmann y el estallido se agrandó por lo que esto significaba.

Así, el equipo de Sensini empieza a enderezar la brújula. Dejando en claro que hay muchas cosas para mejorar, especialmente en la zona defensiva, pero mostrando una intención de cambio y una actitud que deja otra imagen, sin dudas. Bienvenido el cambio, ya que ganando todo se corrige más fácil

3 comentarios:

NoTe dijo...

Salio la mística aflorando en su máximo esplendor. Saludos

http://doblecincopalermo.blogspot.com

Entrevista a Héctor Veira y Agustín Pelletieri

Lautaro Segura dijo...

Si! por fin se nos dio!!!


http://pinchamipasion.blogspot.com/
EL BLOG DEL LEON

Martín Sachella dijo...

que traste!

.viste q la gata jugaba bien en equipos como el pincha!
je.
saludos