Un triunfo vital para cambiar el rumbo

Falta mejorar, pero fue superior a San Lorenzo

Venía de dos derrotas en menos de una semana y quería conseguir los tres puntos. Estudiantes era un equipo golpeado, pero jugaba contra un San Lorenzo que estaba en una situación parecida y también llegaba en baja. La consigna era ganar para cambiar una imagen que estaba muy abajo y recuperar terreno perdido en el comienzo del campeonato (ya que los punteros no habían ganado). El partido no iba a ser fácil, arrancó desprolijo e impreciso como era de imaginar de dos equipos que no venían bien. Y con más ganas y luchas que fútbol Estudiantes le empezó a sacar ventajas a San Lorenzo, que poco a poco retrocedió y permitió el avance Pincha.

Y el gol llegó pasada la media hora, en una de las primeras llegadas del León, con un cabezazo de Cellay luego de un tiro libre que no llegó al área pero que en la segunda jugada encontró más camisetas albirrojas que defensores azulgranas dentro del área de Orión. Poco tiempo después, con la diferencia a favor y un poco mejor de trato de la pelota, también por vía aérea llegó el segundo. Esta vez fue Santana quien la mandó a guardar en el arco propio cuando acechaban Enzo Pérez y Boselli. Estudiantes ganaba con justicia.

La segunda parte tuvo un arranque acelerado de San Lorenzo, pero sólo fueron los primeros 5 minutos en los que el equipo de Russo pudo haber marcado el descuento. De ahí en adelante Estudiantes empezó a pensar un poco y así encontró espacios que no supo aprovechar para agrandar la diferencia, porque promediando el complemento, Estudiantes mereció algún gol más. No lo liquidó y lo pagó: centro al área Pincha, Andújar sale mal y la deja picando y Bergessio se encuentra con la pelota para tocar al gol de un arco vacío. 2-1 y el partido tomaba un tinte de paridad.

Pero fue sólo el acercamiento en el resultado, porque San Lorenzo no inquietó demasiado y el empate le quedó lejos. Sanchez Prette fue la figura excluyente y demuestra estar a la altura del Pincha. Estudiantes no brilló y dejó en claro que queda todo por mejorar si tiene intenciones de pelear algo, pero logró un triunfo que cotiza alto en una fecha que tuvo tropezones de los tres punteros, y en un campeonato irregular tener 4 puntos en tres fechas no es tener las cosas perdidas. Ganó, aunque sin gustar, y de cara a la copa, evitó que la entrante sea una semana de rumores y de cabildo abierto en la patria Pincha, porque Astrada necesitaba de tres puntos para demostrar que no está tan perdido como parece.