miércoles, 29 de septiembre de 2010

EL PINCHA MANDA

ESTUDIANTES VENCIÓ CAMINANDO
Hizo honor a la clásica costumbre. Manda en todo: Arrasa el historial, lidera el Apertura y sueña


El único asterisco del Apertura 2010 se borró de una manera tajante. Para muchos predecible, amén de tratarse de un “clásico”, el derby número 148 no se exceptuó de los contextos. No existieron equivalencias, pese a que la victoria albirroja fue solo por 2 a 0. Los goles anotados por Federico Fernández y Verón no reflejaron ni el carácter y superioridad de uno, ni las limitaciones y el desconcierto del otro. Estudiantes lo buscó lo necesario como para lograr un triunfo por decantación. Gimnasia, desde temprano, padeció el partido en el estadio Centenario de Quilmes.

De arranque, la iniciativa la tuvo el equipo de Sabella. El Pincha buscaba el momento justo para darle el primer cachetazo a la visita. Y llegó a falta de diez minutos para que termine el primer tiempo: Braña coloca un pase aéreo (más que un centro) para Fede Fernández, y el flaco de Tres Algarrobos vence a Sessa. La justicia se hacía presente, Estudiantes empezaba a sonreír, y el plan visitante terminó de derrumbarse en ese momento.

No hubo ninguna pizca de paridad. Ese clásico de las diferencias que siempre ha caracterizado a los enfrentamientos entre Estudiantes y Gimnasia fue tal –una vez más- dentro del campo de juego. Cuando el entretiempo aparecía como un salvataje para los que en ese momento eran de Cocca, Verón pisa el acelerador, entra al área, y luego de un forcejeo es derribado por el mediocampista Fabián Rinaudo. Penal correctamente sancionado por Pittana, que la Brujita cambia por gol y decreta el 2-0. Dos goles que sonaban a ventaja irreversible.

Dicen que del ridículo no se vuelve. De un 0-2 en contra y con Diego Cocca como técnico, tampoco. La segunda mitad fue más de lo mismo. El León, amo y señor del partido, sin grandes esfuerzos y con varios puntos altos producto de la solidez y la jerarquía que lo caracteriza, pudo haber aumentado la diferencia pero no estuvo acertado en los últimos metros. La gente, harta de los contratiempos de tener que viajar una y otra vez a Quilmes, tuvo su premio y armó una gran fiesta.

De esta manera, Estudiantes vuelve a vencer de forma contundente en condición de local. Lo mismo había ocurrido el sábado último, cuando literalmente anuló al Boca de Borghi, y el 1-0 con gol de Rojo desde el inicio fue cosa juzgada. Esta vez la “víctima” fue otra, pero el Pincha ha construido rápidamente una levantada que lo hace olvidar el paso en falso de la Copa Sudamericana. El equipo de Alejandro Sabella alcanzó la cima del torneo, y habiéndose jugado nueve fechas es líder con dos puntos de ventaja respecto a Vélez, el único escolta.

Estudiantes está recuperado, feliz por una nueva victoria en un derby, que lo tiene como padre desde hace más de medio siglo. Ese juego de las diferencias que es el “clásico” platense ha servido para ratificar que el Pincha dará pelea por el Apertura, campeonato al que le ha restado importancia en lo que va del semestre, producto de la agenda internacional. Estudiantes deberá pasar el examen del próximo fin de semana ante San Lorenzo para encontrarse con un calendario descomprimido. Tendrá que recuperar soldados, solucionar problemas como la falta de peso ofensivo y aprovechar el envión de esta sana costumbre. Estudiantes manda a dos puntas. Por dos puntos en el campeonato y por escándalo en La Plata.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

muy buena la nota, lo único que te sugiero es que en el primer párrafo pongas el resultado y quienes hicieron los goles y despues si haces la crónica, igual muy buena la nota!!

Anónimo dijo...

Gracias es una buena corrección, quien sos, te conozco?

Paladar Pincha